Qué es la tecnología olfatoria, en qué consiste y en qué estado está

La tecnología ha avanzado a un ritmo vertiginoso, consiguiendo en pocas décadas lo que no se esperaba lograr en siglos de avances tecnológicos. Con la ayuda de los nuevos inventos hemos conseguido reproducir no solo fotografías, sino también películas o imágenes en movimiento, pero además de esto, los programadores están haciendo que cada año que pasa se pueda realizar unos diseños tanto de humanos como de animales o de ambientes completamente realistas que te hacen pensar que estas en ese entorno cuando todo está realizado a ordenador y no existe. De la misma manera, se ha creado aparatos auditivos para recuperar este sentido e incluso para percibir mucho mejor. Sin embargo, ¿qué es de la tecnología olfatoria? ¿sabes en qué consiste? En este artículo te vamos a hablar de todo lo que necesitas saber sobre estas investigaciones y en qué estado se encuentra.

¿Qué es la tecnología olfatoria?

Desde hace décadas que los científicos e ingenieros están buscando la forma de que el olor pueda ser transmitido de manera artificial, es decir por medio de la tecnología digital. Aunque pueda parecer algo casi imposible, no debemos de olvidarnos en ningún momento que durante muchos años se pensaba que ver películas en 3D era algo inimaginable o incluso que gracias a la realidad virtual y a todos sus elementos podríamos sentir en nuestro cuerpo sensaciones o experiencias que hicieran que pareciese que estamos tocando la hierba fresca.

¿Te imaginas lo que podría ser ver o leer el libro “El perfume” de Patrick Süskind mientras disfrutas de todas las fragancias y olores que el protagonista va experimentando? Esto es lo que desean hacer los expertos en un futuro, que puedas, por ejemplo, ver en televisión el anuncio de un perfume pero que a la par puedas olerlo, o incluso que si ves una película en la que esté el mar, puedas cerrar los ojos, escuchar el sonido de las olas pero también percibir ese toque salino de la arena y del agua.

¿En qué consiste la tecnología olfatoria?

Buscando información por internet y sobre todo, con la ayuda de PacoPerfumerias ya que son expertos en la materia y se han documentado durante años sobre la creación de perfumes, sus orígenes y todo lo que conlleva el mundo del olor, hemos descubierto que por los años 50 ya habían ciertos inventos que hacían todo lo posible para emular olores, consiguiendo que durante la proyección de una película en el cine, los espectadores pudieran, no solo ver y oír lo que estaba ocurriendo, sino también que se pudiera oler, por ejemplo la lluvia, las calles o cualquier otra experiencia olfativa que estuviera presente en la película.

La manera que se utilizaba era en aquella época bastante rudimentaria, puesto que se necesitaban grandes máquinas para que se pudieran expulsar o vaporizar los olores sobre el público. Máquinas que por su inmensidad hacían demasiado ruido y por lo tanto, enturbiaba demasiado la experiencia. Poco a poco se fue refinando los inventos y mejorando la calidad de los mismos, siendo mucho más compactos para que de esta manera la experiencia fuese más placentera para los que disfrutaban de las películas o incluso si se estaba escuchando música, ya que el propio aparato detectaba el estilo de música, si era alegre o triste y conseguía que se vertiese una fragancia que alegraba o que era más tenue y triste.

¿En qué estado se encuentra la tecnología olfatoria en la actualidad?

En la actualidad la tecnología olfatoria sigue su curso buscando diferentes métodos de comercializarse y de ser disfrutado por todo el público posible sin que se trate de un producto de lujo.

A pesar de que muchas empresas tecnológicas han conseguido ciertos aparatos o dispositivos de pequeño tamaño que generan olores conforme se ve una película, se navega por internet o incluso si se lee por medio de un lector electrónico, son muchos los retos que todavía hacen falta alcanzar, sobre todo realizar estudios en los que se pueda comprobar que los olores sintéticos que estas máquinas crean son buenos para el ser humano a largo plazo, ya que no se sabe si después de una larga exposición los sentidos olfativos quedarían obsoletos o incluso dañados al estar constantemente estimulados por estos aparatos.

Es por eso que, para que encontremos en el mercado actual y disfrutemos de la tecnología olfatoria en nuestra propia casa tendrán que pasar un par de décadas para que estemos seguros de que la experiencia es completamente saludable para nosotros, mientras tanto, si queremos oler la playa, el campo o incluso un día de lluvia, tendremos que seguir saliendo a disfrutar de estos entornos abiertos.

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